Nigel Anderson

× Apodo: Sins Reaper & Kurat. { Más que nada usado por socios, aliados y las malas lenguas que lo llaman }
× Nombre/Apellido(s): Nigel Anderson Nostradeu.
× Edad: Aparenta 26 años | Realmente tiene casi 700 años -688 para ser exactos-
× Género: Hombre.
× Orientación Sexual: Bisexual.
× Clase: Clase 1 | Vampiro.
× Empleo: Director de "Hotel Prestige" | Traficante de Armas.




Su apariencia honestamente hablando le hace total y completa justicia a su raza, origen y ser, pues por donde lo mires todo rasgo visible sobresale de lo normal y lo típico que puedas observar en un humano. Comenzando por la forma de su anatomía, la estatura que promedia su cuerpo es alta, aunque no como un pilar imponente, puesto que de alto no mide más allá de un metro con setenta y ocho centímetros cerrados hasta donde tiene conocimiento; pero, no obstante, que si se le suma su peso y masa corporal llega a parecer nada corpulento, pesando poco menos de setenta kilos y que es prácticamente pura fibra. Sus extremidades son largas, demasiado que lo hace ver escuálido, desgarbado, sus huesos tanto en clavícula como en hombros, cadera, codos y rodillas son pronunciados, atípicamente puntiagudos, incluso peor al verse los músculos bien formados y contorneados por todo su ser gracias al arduo ejercicio físico día a día, sucediendo lo mismo con su piel, suave y algo tostada. En general se ve muy delgado, su abdomen es plano y para cualquiera, un personaje fuera de serie, pero no por ésto es débil ni quebradizo, Nigel cuenta con una gran fuerza independiente de su descendencia vampírica que aumenta día con día, ni los años le impiden ser el fuerte hombre que soporta tres veces su propio peso.

Mientras tanto, su rostro es sin duda peculiar, ya se nota un cierto patrón; alargado y puntiagudo es su mentón y la mayoría de sus facciones a decir verdad, todas esculpidas de la manera que armonicen en un rostro sin duda extraño y atemorizante en su medida, su nariz es respingada y larga, lo mismo con su mandíbula y pómulos pronunciados, dentadura blanquecina y no sólo de caninos afilados, es toda la hilera de arriba y abajo quienes acaban en filosas puntas que quedan a la perfección con su amplia y poco confiable sonrisa. Prominentes y rasgados ojos que muestran más de alguna sabiduría pero que es contrastada por la burla y siniestra gracia hacia todo y todos, sus orbes fijas y por igual afiladas son de color azul claro, pero son tan pequeñas que a simple vista y con la primera ojeada no son distinguibles en cuando a color con facilidad, enmarcados con largas y pobladas cejas aunque sin unirse en el entrecejo, de un color parecido al de su cabello. Éste mismo, se podía decir que es corto, hirsuto y puntiagudo que va levantado por completo, son unos pocos los que se mantiene abajo en el sector de sus patillas y el resto forma su flequillo, igual de corto y en su forma que no llega a cubrir sus ojos, sólo inclinado hacia el lado izquierdo y dejando el otro lado de su frente expuesta. Otro aspecto importante y particular son sus orejas, muy reconocibles por el hecho de ser alargadas, mucho más que una normal de un ser humano y acabando en punta, adornada cada uno con dos aretes de plata.

Poco se puede creer, pero Nigel realmente tiene un fuerte sentido de lo que es la moda y la apariencia, ya sea por sus años de ver cuánto desastre en el estilo de la humanidad, como también sus cargos importantes siglo con siglo han creado una apariencia para nada desaliñada y descuidada. Busca en lo particular no verse como un vago, puesto que no es de ternos y sacos constantemente más que para reuniones y asuntos de peso importantes, el resto del tiempo no pasa de un estilo propio, uno que si bien usa chaquetas, no varía de los sport y "moderno", si se le quiere decir de una forma. Con prendas que oscilan en los rojos, azules y negros, colores bastante primarios a decir verdad.




Ciertamente, es extremadamente explosivo. Como bien puede decirlo cualquiera que halla tratado con él, destaca, demasiado, nunca logra pasar desapercibido debido a que su presencia sola suele ser problemática. Cuestiona cualquier cosa que se escape de sus parámetros de gustos o aceptación, tiene una moral laxa en todo el sentido de la expresión. Su comportamiento es total y completamente anárquico e indisciplinario, su afán es hacer que todos y toda la cosa viviente acaten sus órdenes sin chistar, que nadie cuestione su autoridad y pasar por encima hasta de lo permitido y moderado, y sabe exactamente cómo lograr que todos hagan lo que se le plazca, buscas veces recurriendo de plano a la fuerza bruta, se vuelve muy violento en éstos momentos y puede llegar incluso a apuntarte con una 9mm si le cuestionas el sabor de helado que compró. También es chantajista e intimidante, es muy peligroso que dejes que sepa cosas de ti, las usará en tu contra y tergiversará los hechos todo lo posible para que salgas perjudicado y él, se lleve la gloria y la victoria; en éste punto, se vuelve muy directo, determinación titánica y una terquedad admirable, siempre consigue lo que busca y busca lo que consigue con desespero, nada se cruza entre él y su meta y se salva para contarlo. También, resulta impulsivo, hablar con otros individuos no representa mayor problema, pero si quiere decir algo, no duda dos segundos en maquinarlo, sin pelos en la lengua y llega incluso a resultar hirientes, sea por un bien a futuro o por el simple hecho de gula. El respeto no es su mejor virtud pero por creces, es excesivamente vulgar y mal hablado en muchas ocasiones, ni se hable de un protocolo a seguir, su humor tampoco es muy "puro", humor negro y doble sentido son característicos en sus bromas e incluso en su habla común.

Hablando de un punto más "sano", Nigel es muy inteligente y observador, con una gran capacidad de aprendizaje y juicio para darse cuenta de la forma de pensar y actuar de los demás, por más buenos actores que los demás se crean, no es fácil engañar a Nigel, él de por si es el Rey de las mentiras y los engaños, un conocimiento amplio de las actitudes humanas y de infalible percepción. Con la gente que aprecia o se han ganado su interés es igual o incluso más estricto, con un bien común tanto para él como para ellos, cambiando así su escala de valores drásticamente; la única manera de obtener su interés o bien admiración y protección, es a través de la determinación, es un factor que adora en las persona y claro, aborrece la holgazanería y los que se dejan ganar con facilidad, estrictamente prohibido tiene incluso relacionarse con ese tipo de sujetos, quienes trata como una basura y que están gastándose el aire del resto. Para ésto grupo de personas, se tomarán con un Nigel que ni la mano les dará para salvarse del abismo y tocará con el pie a lo sumo.

También, Nigel es demasiado competitivo en sus asuntos, es una persona que si pone el ojo sobre una meta, un objeto, o bien una persona, puede utilizar todos los medios para llegar a éste. Es incapaz de dar su brazo a torcer, nunca se espera de él un plan a medias o una idea vaga, él siempre quiere que todo se haga bien y claro, ganar con ello. Por lo mismo, puede resultar muy orgulloso en el caso de perder, cosa que realmente habrán pasado una o dos veces en su vida a lo sumo, y al no saber qué es la derrota ni la discordia hacia su persona,nunca se puede poner en el lugar de los demás, posee muy poca y casi nada de empatía a pesar de comprender las situaciones y sentimientos de los demás. Entender algo no es lo mismo que aceptarlo y compartirlo. Esa es una de sus políticas. ¿Para qué vamos a hablar del amor? Aparentemente, Nigel se rehúsa totalmente a lo que es una relación estable y un amor ciego sin limitaciones; considerando muchas veces los sentimientos como un obstáculo para sus metas, es más de pensar con la cabeza fría pero el corazón ardiendo, siempre el segundo dominado por lo primero. Y para concluir y por cierto, si formas parte de lo qué cuenta como sus pertenencias o juguetes, lo siento, pero te confinaste a él, puesto que es extremadamente posesivo con lo que es de su territorio... Sí, sí, ésto a veces incluirá a sus hijas.




Muy pocos conocen a ciencia cierta el nacimiento o bien, el origen del ser que todos conocen como Nigel, aparentemente ni él mismo sabe de dónde proviene su etnia con claridad, pero no le importa mayormente. Y es que haber vivido casi setecientos años en ésta tierra de mortales, haber experimentados tantos altos y bajos como también los ha tenido su vida, ¿A quién rayos le importaría ahora conocer dónde naciste? A Nigel, no. Pero básicamente, podemos hacernos una idea de cómo ha experimentado y sobrellevado la vida de un inmortal, de alguien que no califica de vivo pero tampoco camino entre las filas del inframundo.

¿Qué podemos decir de su familia? Ciertamente, muy poco. Oscuros son los recuerdos en su mente, especialmente de su madre ya que la época con la que convivió con su progenitora fue escasa en comparación a su figura paterna. ¡Pero no por ésto es menos querida! La verdad, no siente cariño ni mucho menos, recuerdos gratos de quienes fueron sus creadores. ¿Por qué? Bueno, fácil. Ambos, vampiros de la élite, aquellos con la sonrisa más temida, con la experiencia que ningún libro puede otorgarte, y una fuerza y galantería indiscutible que te hace replantearte tu propia utilidad e importancia. Seres tan fantásticos a los ojos de su pequeño hijo, muertos de la peor forma, de la forma más horrible y denigrante que pudo Nigel imaginar. Muertos a manos de humanos. De aquella raza ínfima que con grima recuerda cada día, asesinos que se llevaron vidas tan valiosas y por sobre todo, más importantes que la de ellos. Sin embargo, Nigel jamás pudo llegar a odiar a los humanos por ello. ¿La razón? No le pregunten, ni él mismo lo sabe. La verdad del asunto, es que toda esa envidia, todo ese rencor, toda esa vergüenza de decir "Mis padres dejaron de vivir a manos de mortales", todo aquello recayó nada más ni nada menos que en ellos, el recuerdo y los cadáveres hechos polvo de sus padres. Llamados por él mediocres, débiles, traidores, pero sobretodo, cobardes, fueron librados de su cabeza y exiliados de todo lazo que el joven vampiro con la edad mortal de 51 años, pudiese tener, se desligó de los débiles desde entonces, aquellos que no le servían más que para dolores de cabeza y que a cuestas eran una carga.

El tiempo que en la familia fue estable, el joven Anderson, como toda la servidumbre adoptó para llamarlo, mostraba un interés total por destacar, por ser alguien más y no un peón del destino. Nunca mostró la debilidad para jugar en el tablero, si no ser él quien moviese esas piezas y jugara con los más grandes. Cabe decir que tanto en la vida social, deportes, artes, estudios, y todo aquello que pudiese importar a largo plazo en el mundo, Nigel lo tenía. Lo desarrolló día con día, como así la pantalla del ser bueno que escondía a la bestia que se mofaba de cada mortal que su visión capturara, o bien, que sus colmillos reclamaran como cena. De su madre sacó la inteligencia, la capacidad de pensar fríamente y tomar las mejores decisiones a la hora del mandato e impedir el libre albedrío, sin contar claro un porte que ni su alocado sentido de la orden podía borrar. Su padre le dio por herencia la fortaleza de sobrellevar el día a día, la capacidad de tener todo un séquito detrás tuyo que inclinara la cabeza al más mínimo chasquear de tus dedos. Mirar al rededor, definir tu camino y que todos besaran el suelo que pisaste, aquello era responsabilidad de su progenitor.

¡Pero pamplinas! Que ni eso puede agradecerle a los sacos de polvo que forman parte de la contaminación ambiental hoy en día. Desde entonces su vida se vio volcada y enfocada en sacar a renombre su apellido, otra vez; lo malo es que ni le interesaban los negocios familiares que tanto por parte de madre y padre le fueron heredados. Una sastrería y una cadena de hospitales. ¡Absurdo! Lo segundo sin duda le gustaba, es decir, ¿Sangre gratis? Podría ser tentador, pero al fin y al cabo Nigel conocía sus límites, y no eran el dirigir sólo una hostelería para salvar vidas, como nombraba las clínicas desde muy pequeño. Su solución fue muy radicalista, en menos de dos semanas vendió los derechos de ambas empresas y despidió a todos los empleados, quedándose con una fortuna que si bien antes no tenía mala situación, ahora nada en dinero, literalmente de haber querido. Fue entonces que viajó, el joven vampiro que nombrado como muchos un lobo solitario con inteligencia y astucia de zorro se embarcó en el primer vuelo que pudo hallar, saliendo de un país que ahora, no recuerda ni costumbres ni bandera. Que patriota de tu partes, Nigel.

Atrás dejó toda su vida y llegó al país de Rusia, famosa en ese entonces por la alta tasa de vampiros que secretamente lo habitaba, pero reconocido por ellos mismos como un buen alojo para los jóvenes vampiros, y considerando que Nigel no pasaba de los 100 años, fue el lugar perfecto para gastar su sádica personalidad equipada con la dotación de dinero detrás. Miren que hasta servicio militar se dio el lujo de cumplir con tal de que su conexiones diesen frutos. ¿Quién no se fijaría en un soldado que destacaba en tantos aspectos y más en esas épocas?. Sin embargo, no todo fue color de rosa, o más bien, se volvió así. Si bien Nigel siempre se mostró como el duro y sarcástico hombre que sólo se interesa en ganar, tenía sentimientos ocultos incluso para su persona. llegó a su vida una vampira, una muchacha de increíble astucia y de fuerza innegable, pobre de quien la llamase damisela en peligro, como bien una vez el joven hizo y no consiguió más que una semana de aplicarse hielo en la mejilla ante un golpe que se oyó hasta China. Una relación muy fugaz fue esa, dejando incluso una niña en el camino que sería la descendencia de puros vampiros y de sangre limpia. Lo malo, la relación no parecía ser estable, la mujer en cuestión huyó ni bien pudo ver la oportunidad y dejó a Nigel con lo poco y nada de corazón que no le había robado y una hija entre sus brazos a criar. Algo que hizo, pero a su manera, dándole las herramientas para sobrevivir en el mundo y luego, tomando un nuevo embarque al siguiente destino de su vida.

Su parada llegó a Estonia, un país sin duda maravilloso y encantador hasta ciertos modos, mira que llegar justo en periodos de intercambio de posiciones que salía de la servidumbre y entraba en el siglo XIX, Nigel iba ya para los 200 años de edad. Le parecía impresionante lo estúpido que muchos lucían en esa época si los mira desde ahora, buscando y luchando por un puesto en la alta sociedad cuando él bien podría moverlos a todos con palillos se le antojaba. Allí, Nigel aprendió el sucio truco de las estafas, el tráfico, las amenazas, la mafia en sí. ¡Y por Dios que le gustó! Era como estar en su salsa, el vampiro sin duda mostraba un gran interés por los trucos sucios si con ello conseguía todo lo que su sed de victoria y orgulloso podía necesitar, con toda la colección de hoteles que iba impartiendo lentamente por Estonia y pronto otros países de la poderosa Europa. Rápidamente, sus socios, y también, enemigos, comenzaron a darle el apodo que con más vanagloria lleva encima, "Kurat". Porque sí, era todo un diablo y con todas sus letras, despiadado en todo sentido para jamás pensar en los demás y sus ideales, pisando sus sueños para alcanzar los suyos, haciendo tratos y juegos que bien podrían llamarse pactos con el diablo pues dejaban detrás unas fuerte y horrible consecuencia. Claro, no para él.

Pero algo le ocurrió, algo ocurrió en Nigel que jamás podrá entender y que tampoco, podrá odiar pero tampoco alabar. Una mujer acabó siendo su perdición sentimental por segunda vez. Con una fortaleza que podría dar hasta los humanos sin más, la estado unidense cautivó lo poco y nada de corazón que el vampiro guardaba. Incluso de allí salió su segunda hija cuando ya bordeaba los 400 años de edad. Aparentemente no entendía, puede que fuese el efecto placebo que se originó por la pérdida de su primera pareja, pues ahora las cosas fueron demasiado diferentes. Sin contar el hecho de que se vio prácticamente obligado a aprender un nuevo idioma para convivir con ella, sus personalidades eran muy diferentes a la antigua mujer en su vida, y más aún: Aquella era una humana. Era tan irónico, que una de las especie que consideraba comida, un subordinado y hasta insectos, ahora caminara de la mano a su lado sin reproche ni ninguna monarquía propia. La mujer puede que le halla hecho feliz lo que duró, decir "duró" puesto que jamás estuvo en la opción de convertirla en uno de los suyos y terminó por morir irremediablemente entre los lamentos de su hija, una híbrida con una personalidad muy parecida a la suya, pero que logró ser bastante cercaba a él. ¿Era el lazo de sangre? No, después de todo a ambas hijas las veía por igual independiente de la "pureza" en sus venas.

Al final, su asentamiento se dio en Nueva York, los años pasaron y su raza poco a poco tomó la forma que él quería que tuviese, ya no se escondía de la sociedad y eran vistos y apuntados como herejes, ya no eran ellos los que debían mentir para llevar una vida medianamente aceptable y sustentable. Ahora era al revés, eran ellos quienes dictaban lo bueno de lo malo, la injuria de lo perdonable, lo solemne de lo traicionero. Como le encantaba. Su negocio creció igual que sus años, con ya pasados los 600 años Nigel no ha cambiado su personalidad pero sí ha perdido muchos de sus recuerdos, como otros a borrado por su propia conveniencia, y además, muchos están guardados en las puertas de su mente, latentes ante el más mínimo estímulo para rememorarlos. Ahora su vida son sus hijas, y si bien no es el mejor padre de la historia, tampoco es el peor que ha pisado éste planeta. Eso sí, dudo que vaya a reconocerlo.





×gustos

Ganar, es un adicto a los juegos ya sean de azar, simples palabras o bien como lo es su profesión, en los deportes; al ser tan competitivo gusta tanto de ganar que para él la derrota no es una opción. Los refrescos, nunca pasa de tomar algo que no sea una bebida gaseosa a toda hora, es incluso capaz de comprar una franquicia para no quedarse sin reservas de ese líquido. La obediencia, claramente, al igual que el poder y la autoridad, bien es dicho que Nigel es irreverente a la autoridad creando la suya propia. Otro de sus vicios es la goma de mascar, pero no se engañen que realmente, no le gusta lo dulce, ya que la única goma de mascar que consume día a día es la sin azúcar. Así por otro lado, y aunque muchos no le crean por su físico, le encanta, fascina, adora comer carne, por él vivía de dicho alimento si el cuerpo para trabajar bien no requiriera más que sólo vacuno y esas cosas.


× odios

Principalmente y de manera muy repetitiva él te responderá que su mayor molestia es la gente que dice y piensa ser superior a él, realmente aborrece ser mandado y no lo tolera ni mucho menos aguanta, es igual con la gente que no tiene sueños, anhelos, que no piensa en una meta a largo plazo para su vida y que sólo van por allí sin mayor problema. Los dulces, como se explicó arriba, no es muy fanático y es rara la ocasión que prueba dichos alimentos, sólo viéndose forzado o cosas por ejemplo. Aun cuando se difiere de lo demás, nunca está de sobra mencionar que le disgustan las órdenes que no se cumplen, mucho más si son órdenes que él expresó directamente. Y por sobre todo, ser subestimado, que desconfíen de sus propias capacidades.


× curiosidades

- Tiene una basta colección de armas de fuego, del calibre, tamaño y magnitud que se puedan imaginar. Ésto gracias a su segundo "trabajo" como a los contactos que tiene en la armada Estado Unidence que, debido a ciertos tratos, hacen y deshacen sus pedidos tales para: Metralletas, Tanques, Escopetas, Ballestas, Pistolas, Bazookas, Helicópteros, Aviones de asalto, incluso un Submarino.

- Posee un cuaderno de tapa blanda y negra. Llamada por él "La lista del demonio", allí anota y almacena variados y diversos datos de personas que conoce. Principalmente son datos vergonzosos o que son fácilmente empleados para colocar en aprietos a sujetos a su gusto en sus chantajes.

- Es muy común en él cuando hace exclamaciones de sorpresa, alegría o simplemente acabar o comenzar una oración hacerlo con un "¡Ya-ha!" en voz aguda. Su marca al hablar, por así decirlo.

- Hasta el día de hoy, no tiene nada de lo cual arrepentirse o sentir remordimiento.

- Contrario al pensamiento popular de alguien tan "ruin", Nigel no fuma ni toma de manera compulsiva, es muy moderado en éste sentido.

- Su hobby más grande, y el que usa siempre para mantenerse activo, es el deporte, más específico el Fútbol Americano.

- Tiene por costumbre disparar al aire si está alegre o celebrando.

- Él supervisará a los esclavos que sus hijas consigan en dado caso, con la justificación de que no quiere que su "sangre" esté rodeada de perdedores o inútiles.

- Habla inglés, español, estonio y alemán.



Anime/Manga o Videojuego al que pertenece: Eyeshield 21.
Nombre Real: Hiruma Youichi.